Homilía para la
fiesta de María Madre de Dios - Lc. 2:15-21
por el
Canónigo Dr. Daniel Meynen
" Sucedió que cuando
los angeles se fueron de ellos al Cielo, los pastores se dijeron unos a
otros: «Vayamos hasta Belen, y vemos esto que ha sucedido, y que
el événement que el Señor nos ha
manifestado.» Ellos se fueron apresuradamente y hallaron a
María y a José, asi como al recién nacido,
acostado en un pesebre. Al verlo, ellos dieron a conocer lo que se les
había dicho, acerca del niño.
" Y todos aquellos que les
escuchaban se maravillaban de lo que los pastores les decían.
Pero María, guardaba todas estas cosas y las meditaba en su
corazón. Y volvieron los pastores, glorificando y alabando a
Dios, por todas las cosas que habían oído y visto, como
se les había dicho.
" Cuando se cumplieron los
ocho días, había que circuncidar an niño, le
pusieron el nombre de Jesús, el cual había sido dado por
el angel, desde antes de su concepción. "
Homilía:
"Sucedió que cuando
los angeles se fueron de ellos al Cielo, los pastores se dijeron unos a
otros: «Vayamos hasta Belen, y vemos esto que ha sucedido, y que
elévénement que el Señor nos ha
manifestado.» Ellos se fueron apresuradamente y hallaron a
María y a José, asi como al recien nacido, acostado en un
pesebre."
Nosotros celebramos hoy una
fiesta de María: Invocandola bajo el título y el vocablo
de Madre de Dios! Es un muy grande día, pues ese título
dado a María es el que expresa su mas alta dignidad, la
función más elevada que María ejerce en la
misión de salvación. La razón es que se trata de
un título absolutamente unico: Nadie, ninguna otra criatura ha
podido ni podrá jamás honrarse con una dignidad tan
grande, pués Jesús, el Hijo de Dios, no tuvo, no tiene,
ni tendrá jamás otra Madre! Esta relación entre el
Hijo de Dios y María es una relación que no tiene
comparación, y que, por esta razón es muy misteriosa, -
es el Misterio mismo de toda la vida de María - pués esta
relación no tiene ningun punto de comparación que permita
una comprehención completa.
María es una
criatura unica, no solamente por ella misma, pero también y
sobretodo en virtud de su relación privilegiada con el Cristo,
su hijo, hijo de sus entrañas. Esta relación de
María con el Hijo de Dios, le confiére a ella, Mujer
Bendita entre todas las mujeres, un caracter muy particular: Ella es
aquella que fue unida a Cristo, no solamente de forma espiritual, pero
también corporalmente. Es ése caracter único que
le permite de unirse a la muy Santa Trinidad de una manera tan
misteriosa, que todos los demás fiéles de Cristo no
podrían hacerlo. La unión de la muy Santa Trinidad y de
María va tan lejos que San Maximiliano Kolbe, después de
San Hésychius de Jerusalem (PG 93:1461), no dudó en
proclamar a María, "el cumplimiento universal de la muy Santa
Trinidad"!
" Al verlo, ellos dieron a
conocer lo que se les había dicho, acerca del niño. Y
todos aquellos que les escuchaban se maravillaban de lo que los
pastores les decían. Pero María, guardaba todas estas
cosas y las meditaba en su corazón! "
Una vez que Jesús
había nacido, María no tenía mas en ella la
presencia corporal de su Hijo. Pero, entonces, ella se unió
intensamente a su pequeño recién nacido, y su
esprítu estaba en tal contemplación que hasta esa
presencia corporal anterior al nacimiento fué como sublimada y
sobrepasada por esta misteriosa presencia espíritual, fruto de
la meditación y de la contemplación. María en
oración no era mas que un solo ser, junto con su hijo!
María vivía ya aqui abajo esta unión de la gloria
que es el compartir de los elegidos del Cielo! Cierto, María
continuaba viviendo de fé como todos los fiéles, pero
ella tenía además, esta experiencia mistica que
fué la suya durante toda su vida sobre la tierra.
" Y volvieron los pastores,
glorificando y alabando a Dios, por todas las cosas que habían
oído y visto, como se les había dicho. Cuando se
cumplieron los ocho días, había que circuncidar an
niño, le pusieron el nombre de Jesús, el cual
había sido dado por el angel, desde antes de su
concepción. "
Que nosotros podamos
cumplir lo que los pastores hicieron en esa noche del nacimiento del
Salvador! Los pastores se marchaban, glorificando y alabando a Dios!
Esto es lo que nosotros debemos hacer durante nuestra vida sobre la
tierra: Alabar y glorificar a Dios. Nosotros debemos alabar y
glorificar a Dios, como los pastores que vieron no solamente al
niño Jesús, sino también a José y sobre
todo a María! Ellos vieron a María en
contemplación y en adoración delante de su Hijo: Esta
visión los conmovió profundamente, y les llevó a
alabar y glorificar a Dios!
Nosotros también,
que vamos a celebrar la Santa Eucaristía, debemos alabar y
glorificar a Dios: No es este acaso, el sentido mísmo de la
palabra Eucaristía, que quiere decir "acción de gracias"?
Pidamos a María que
nos ayude en nuestra oración: Pidamosle su espíritu de
contemplación y de adoración! Que este año que
comienza hoy, sea nuestro año con María, en la fé
y el amor de Dios, venido al mundo para salvarnos a nosotros!
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